La industria alimentaria es quizá la más ligada a nuestra vida diaria y por ello la que más rápido evoluciona.Por este motivo, los desafíos que puede enfrentar este 2019 son muchos y variados. Aquí te presentamos algunos de los más importantes.
En la logística
Del pasto al plato hay una gran cadena de suministro; y la cadena se congestiona por nuevas regulaciones, límites de la capacidad de carga, escasez de conductores, desastres naturales, etc. De todos esos desafíos surgen nuevas respuestas para su solución.
Por ejemplo, una forma en que se ha abordado el problema del transportar grandes cantidades de materia prima es mediante el uso de flotas dedicadas a ciertos mercados. También se están comenzando a buscar cada vez más los servicios de carga consolidada, lo que además de resolver problemas de capacidad, mantiene los costos bajos.
En la tecnología
La tecnología y la innovación son diferenciadores y piezas fundamentales para el éxito en esta industria, desde el transporte de alimentos hasta su preparación.
Sin embargo, el de sistemas de gerenciamiento de almacenes, retail y establecimientos de alimentos, así como la interpretación de sus datos están llegando para encontrarse con un equipo experimentado de profesionales sin la preparación suficiente para implementarlos de manera eficiente.
Otro gran reto que involucra a la tecnología es la personalización de los sistemas con funcionalidades ajustadas a las necesidades operativas de cada negocio.
En el caso específico de la industria alimentaria, el uso de la tecnología es potenciador de eficiencia, desde las cocinas hasta los comedores, como lo afirman el 95% de los restauranteros en EU.
El nuevo reto será encontrar el equilibrio entre la eficiencia aportada por la innovación y el toque personal y humano.
En la seguridad alimentaria
La salud pública es la principal responsabilidad de la industria de servicios alimentarios para con los consumidores, por lo que las prácticas de inocuidad de los alimentos continúan refinándose y actualizándose junto con la legislación.
Aun con eso, la industria de servicios de alimentos enfrenta nuevos problemas en el procesamiento de los mismos:
Los congelados El uso directo de frutas congeladas en batidos, y de verduras congeladas en ensaladas sin cocción es una tendencia hoy.
Originalmente los congelados se consideraron una alternativa menos procesada que los enlatados y se introdujeron para que los cocineros y los panaderos tuvieran ingredientes de temporada todo el año. Sin embargo, los productos congelados no están clasificados como alimentos listos para comer, y muchas personas no lo saben, por lo que actualmente tanto en los restaurantes como en los hogares, los utilizan desde su estado crudo congelado: todo un problema de seguridad.
La industria de alimentos congelados no pudo predecir las nuevas formas en que se utilizarían sus productos, por lo que se tuvieron que ajustar los estándares de seguridad relacionados a la tolerancia de patógenos en el proceso de producción. Ahora ese es el reto.
También existe una nueva legislación sobre el etiquetado de los alimentos procesados. Sin duda la conciencia pública sobre los problemas de salud como la obesidad, la diabetes y la hipertensión, son más fuertes en la actualidad; en consecuencia, aumentó la presión de los consumidores para que los productores de alimentos etiqueten sus productos, informando sobre su contenido nutricional.
El etiquetado de OGM (Organismos Modificados Genéticamente) y las grasas trans ya están vigentes en algunos países. Las nuevas obligaciones sobre etiquetado también se ha inducido a los restaurantes al incluir información calórica en sus menús.
Ese es otro ejemplo de una necesidad de cambio en la industria que pude convertirse en una oportunidad.
En lo ambiental
Los restaurantes todavía contaminan mucho. Algunos han adoptado el uso de material reciclado en los empaques de alimentos, sin embargo, la gestión de la eliminación de desechos sólidos sigue siendo un desafío. Se requiere adoptar soluciones innovadoras para disminuir el desperdicio de alimentos.
En cuanto al agua, se necesita una gestión eco-eficiente. Es apremiante la optimización de los procesos para minimizar su consumo; su depuración y reutilización, sin afectar la calidad de los productos, así como mejorar la calidad de los vertidos finales -residuos líquidos y lodos-.
En ese sentido han surgido soluciones tecnológicas para optimizar desde la óptica medioambiental los procesos de desinfección y limpieza.
En cuanto a la energía, los desafíos son el mejor aprovechamiento energético y la integración de energías renovables: el biogás, la biomasa; el biometano a partir de residuos agroalimentarios, y el concepto de biorrefinería en la industria agroalimentaria serán clave en adelante.
En los alimentos
Los consumidores actualmente quieren alimentos ricos pero que también sean buenos para la salud, pues están cada vez más preocupados por los efectos del gluten, la lactosa o los pesticidas, por ejemplo.
Este es otro desafío para la industria: hacer atractiva, divertida y deliciosa la comida sana. y también es una gran oportunidad económica pues la mayoría de los clientes estarían dispuestos a pagar más por comer mejores alimentos, más ecológicos.
El hecho es que lo saludable llegó para quedarse, y ya no se tratará solo de incluir ingredientes sanos en el menú, sino de ir más allá. Los nuevos formatos que siguen esta tendencia son restaurantes holísticos, cafés específicos para dietas, y restaurantes elegantes y saludables.
En la experiencia del cliente
En 2019 hay una clara inclinación de los comensales por las experiencias y las sensaciones duraderas. Especialmente, los millennials, prefieren gastar dinero en experiencias que hacerlo en comprar cosas, lo que traerá nuevos conceptos gastronómicos como la experiencia de la comida multisensorial o la cena narrativa.
Por otra parte, en los últimos años, las redes sociales han revolucionado la industria alimentaria, provocando que los restaurantes diseñen alimentos y bebidas pensando en la maximización del impacto de las imágenes compartidas. Ahora, la tendencia se ha extendido hasta los videos. La estética es de nuevo importante
En lo social
Finalmente, los consumidores exigen cada vez más transparencia sobre el origen de los alimentos, los métodos de cultivo y procesamiento, e incluso en los precios, así como más énfasis en el comercio justo y la diversidad, y seguirán tomando medidas adicionales para aprender más sobre dónde y qué comen, aprovechando la tecnología.
En la industria de servicios alimentarios, las nuevas peticiones de los consumidores y el desarrollo de tecnología específica para la industria son desafíos que siempre pueden convertirse en oportunidades. Revisa estas tendencias y adopta aquellas que pueden hacer crecer tu negocio.